No voy a hablar de tendinitis, bursitis, rodilla de corredor, periostitis, menisco, rotura de ligamentos o fascitis. Estar lesionado, es mucho más que un deterioro físico. Frustración. Te ves obligado a parar. Joder, es justo lo contrario a mi estado natural. Movimiento. Cuando uno se lesiona tiene un largo trabajo por delante, la recuperación es dura, en el 90% de las ocasiones dolorosa pero la sensación de pérdida, la desorientación, sentir que tu día tiene demasiado tiempo vacío, la ausencia de agujetas y sobrecargas son mucho más difíciles de llevar que el dolor y la fatiga. Entrenamos, nos sacrificamos, alargamos nuestro día y planificamos nuestras vacaciones para hacer lo que nos gusta. Sinceramente, echo de menos que mi ropa de deporte apeste.
Nunca me he entrenado para estar lesionado y ahora me doy cuenta que me he equivocado, no soy un deportista completo, he descuidado un aspecto importante. No, no estoy diciendo que tengas que tener las lesiones presentes en tu día a día, pero valorar tu vulnerabilidad está bien. Tras dos meses de inactividad te haces más sensible, más vulnerable y tu rabia se va debilitando. Dos meses. Seré gilipollas, podía haber arreglado esto mucho antes, gracias a un carácter que no funciona precisamente bien cuando no tiene lo que quiere he perdido un tiempo precioso para ponerme manos a la obra.
Ahora he retomado mis entrenamientos o más bien mi rehabilitación, he buscado soluciones, si no puedo correr, ahora puedo pedalear, tengo más entrenos de fuerza y lo más importante mi mente está más clara, está enfocada en un objetivo. Los objetivos son la respuesta, nos movemos tras ellos y sin ellos estamos perdidos, la cabeza funciona mejor cuando persigue uno, cómo cuando vamos completando una prueba saltando de un avituallamiento a otro. Ahora soy lento, no te imaginas cuanto y creo que no llegaría a meta en un 10000, sin embargo he recuperado mi estatus de deportista, he vuelto a la disciplina, al sacrificio y cuando mi rodilla vuelva a ser la de antes seré mejor, quizás no más rápido ni más resistente ni más explosivo pero habré alcanzado mi objetivo. Estaré recuperado y listo para el siguiente.
Solo me que dar decir una cosa: ¡LECCIÓN APRENDIDA!
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