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> Salto al Cajón

Os hace falta un plus en vuestras piernas, ese toque explosivo que aumente vuestro rendimiento, ese plus que os permita esprintar en los últimos kilómetros y restar ansiados minutos en vuestras marcas personales. ¿Aún no habéis dado con la clave? Eso os pasa por no echarnos demasiada cuenta, pero ahora os traemos algo que sin duda debes incorporar en tus rutinas de entrenamiento, además de un nuevo término que incluir en tu vocabulario deportivo, la Pliometría.

Con el «Salto al Cajón» aumentarás considerablemente el rendimiento de tus piernas, obtendrás potencia, ideal para aquellos que desean correr más rápido o aquellos que desean subir montañas más altas. ¿Y por qué diantres, es tan bueno este ejercicio? Simple, trabajamos el apartado cardiovascular y realizamos un ejercicio de alta intensidad. 

¿Pliome...qué? Según Wikipedia, la Pliometría: 


Más claro agua. Vamos que si no lo conocíais, os traemos digamos de una manera sutil...un entrenamiento que es la repolla. Ya te ha entrado el gusanillo verdad, ahora tras leer la parte pesada del post, deseas saber como se entrena, O.K, vayamos al grano. 

Como siempre nos gusta traer ejercicios que son accesibles a todo el público. El «Salto al Cajón» es un ejercicio básico de CrossFit, pero si no tienes la posibilidad de practicar este excelente deporte, también puedes practicarlo en los bancos de tu parque preferido. Por norma general en CrossFit, se usa un cajón estándar de unos 60cm para hombres y 50cm para las mujeres. De este modo intenta buscar un banco que aproximadamente tenga esta altura o simplemente una altura asequible. 

· E J E C U C I Ó N · 
1º PARTE
  1. Situarnos a una distancia prudente del cajón. 
  2. Comenzar totalmente erguidos con los brazos y piernas extendidas. 
  3. Mantener el abdomen en tensión durante el ejercicio.
  4. Flexionar las piernas manteniendo la verticalidad del torso. 
  5. Ayudarnos de nuestros brazos para impulsarnos en el salto. 
2º PARTE

  1. Sobre el cajón erguirnos por completo extendiendo la cadera. 
  2. Bajar al punto de origen dando un pequeño salto.
  3. Rebotar amortiguando la caída y volver a impulsarse.
Como siempre os facilitamos un video a continuación que os aclarará algunas dudas sobre la ejecución: 



¡Salta, runner, salta!

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